X
X

Categorias

Recomendaciones

AMIGDALITIS CRÓNICA EN NIÑOS

2015-07-23 11:17:10

Amigdalitis crónica. una infección permanente.

Además de mal sabor de boca y alteraciones del gusto, la amigdalitis crónica supone un foco de infección que puede causar inapetencia, somnolencia y accesos de fiebre ocasional a lo largo de toda la vida

Las amígdalas:
una fábrica de anticuerpos
Las amígdalas palatinas son dos grandes acúmulos de células inmunitarias situados a cada lado de la entrada de la faringe, entre los pilares del paladar. Son lo que pudiera decirse una fábrica generadora de anticuerpos, fundamentalmente en la infancia.
Su curva de crecimiento

De muy pequeño tamaño en los primeros años, las amígdalas van creciendo a lo largo del tiempo, y con ellas su función protectora. A medida que los niños crecen, el contacto con virus y bacterias va activando las células inmunitarias, aumentándolas de tamaño. Generalmente, alcanzan un pico máximo entre los 3 y los 6 años, momento a partir del cual empiezan a reducir su tamaño, quedando prácticamente inactivas después de la pubertad, aunque persisten de por vida.

El frío: un desencadenante
La infección se produce cuando la actividad de los microorganismos supera la capacidad defensiva de las amígdalas. Esto puede ocurrir cuando se produce una invasión masiva por gran cantidad de gérmenes contra los que no se dispone de anticuerpos, o cuando se produce alguna alteración de los mecanismos de defensa. Por ejemplo, la inhalación de aire frío provoca una alteración en la formación de moco y en la actividad de la mucosa nasal. De esta forma, las fosas nasales filtran menos gérmenes de lo habitual, lo que repercute en la faringe y las amígalas, que reciben aire con más gérmenes de lo habitual, pudiendo provocar una infección.

Mecanismo de la infección
Aunque esta infección puede presentarse a cualquier edad, no suele ser normal que aparezca antes de los tres años de edad ni después de los 50. Suele comenzar de forma brusca, con síntomas generales. Es habitual la fiebre, que puede llegar a ser muy elevada, acompañada de escalofríos, malestar general y dolor de cabeza. A continuación se instala un característico dolor de garganta que dificulta la deglución y altera la voz, generando una voz gangosa típica. También suelen aparecer ganglios aumentados en la zona del cuello. Estos síntomas suelen durar entre dos y tres días, momento a partir del cual empiezan a decrecer hasta curarse en 6 o 7 días, con el tratamiento adecuado.

Tipos de amigdalitis aguda
Amigdalitis pultácea o angina blanca: en el 50 % de los casos en que se desarrolla una inflamación aguda circunscrita a las amígdalas palatinas la causa es una infección por la bacteria estreptococo betahemolítico. En las infecciones bacterianas aparecen sobre las amígdalas unos puntos blanquecinos, constituidos por folículos linfoides, más grandes de lo normal, y pus, de ahí su nombre de angina blanca.
Cuando la infección es solamente vírica puede producirse una amigdalitis eritematosa, caracterizada por un aumento de tamaño y un enrojecimiento de las amígdalas.
En los niños, el crecimiento exagerado de las amígdalas propio de la amigdalitis crónica provoca problemas respiratorios y episodios de apnea nocturna que repercuten directamente en su rendimiento escolar

La versión crónica
La amigdalitis crónica se produce como resultado de infecciones repetidas de las amígdalas, que acaban dejando un residuo de gérmenes acantonados, los cuales mantienen un estado de infección permanente. Según la edad y la fase evolutiva, se distinguen varios tipos:
Cuando la infección crónica da lugar al desarrollo exagerado del tejido que forma las amígdalas, hablamos de amígdalas hipertróficas, lo que suele ocurrir en niños. En algunos casos estas amígdalas pueden obstruir la entrada a la faringe.

Posteriormente, la infección crónica puede provocar incluso la formación de pequeños acúmulos de pus en profundidad, que al abrirse forma pequeños cráteres en su superficie: son las amígdalas crípticas, caracterizadas por una superficie perforada por numerosos orificios que se comunican, y por la que puede aparecer una secreción amarillenta grumosa llamada caseum.
En la edad adulta, cuando las amígdalas dejan de ser funcionantes, la infección crónica destruye el tejido amigdalar, dando lugar a las llamadas amígdalas atróficas, de tamaño muy reducido.
Trastornos respiratorios

Cuando el tamaño de las amígdalas es exagerado, pueden originarse trastornos respiratorios, al impedir el paso normal del aire a las vías respiratorias. Si durante el día el niño mantiene la boca abierta, adoptando un rictus característico, durante la noche no ocurre lo mismo, ya que la musculatura se relaja y la lengua cae fláccida hacia atrás, cerrando la entrada a la orofaringe. Esto provoca que el niño ronque y puede generar incluso episodios de apnea nocturna, es decir, una obstrucción total de las vías respiratorias, debido a la cual el niño deja de respirar durante unos segundos. Hay niños en los que se producen varias crisis de apnea, provocándole despertares sobresaltados. Las consecuencias de esto son somnolencia diurna y abotargamiento. No es de extrañar que muchos niños con hipertrofia amigdalar estén distraídos y sufran retraso escolar.

Mal sabor de boca
La amigdalitis crónica suele presentar mal olor de boca y alteraciones del gusto. Además, puede actuar como un foco infeccioso desde el que se diseminan gérmenes a todo el organismo, causando múltiples trastornos, como inapetencia, sensación de cansancio, somnolencia o accesos de fiebre ocasionales.

TRATAMIENTO NATURISTA:TOMAR MINIMO 2 MESES, MELASOR 10 Y COMPLEPLUS 7
Niños de 2 a 11 años: 1 cucharada cafetera 3 veces al día antes de los alimentos
Niños de 12 años y adultos: 1 cucharada sopera 3 veces al día antes de los alimentos

MELASOR 10 es un suplemento alimenticio que prepara al organismo para hacer frente a los cambios bruscos de temperatura y al período invernal. Potencia los sistemas de defensa inespecíficos del cuerpo y por tanto aumenta de forma significativa la función inmunológica del individuo proporcionándole los medios necesarios para impedir el desarrollo de microorganismos potencialmente dañinos o patógenos y destruir células infectadas o malignas.

La relación entre la actividad del sistema inmunitario y ciertos elementos vitamínicos ha sido observada reiteradas veces por los clínicos. Este sirope contiene una proporción considerable de vitaminas del grupo B, A y C indispensables para el buen funcionamiento del sistema inmunitario

El aporte correcto del Zinc aumenta la proporción de linfocitos T4 (Mac Kallan y Collins) que disminuyen en proporción en el líquido seminal y en el medio celular con la edad. El aporte extra de zinc favorece por tanto la producción de linfocitos T4 relacionados con ciertos aspectos de la inmunidad inespecífica, interviniendo también en el proceso de síntesis de las prostaglandinas y de las interleucinas.

El Cobre es un gran antiinflamatorio y antivírico y, entre otras acciones, también es estimulante de las defensas orgánicas, nos protege frente a las toxinas bacterianas y es un componente de diversos sistemas enzimáticos como la SOD que neutraliza la producción de radicales libres.

El contenido en Selenio le confiere a este sirope cierta actividad sinérgica con el zinc, ya que ambos se potencian en su acción favorecedora de la síntesis de prostaglandinas. También nos protege y destruye a los peróxidos derivados del metabolismo de los ácidos grasos insaturados.
El Zinc y Cobre forman una pareja muy estable de minerales que, aunque tienen funciones fisiológicas diferentes, se absorben, movilizan y almacenan de un modo parecido. Estos van en liposomas, formados por fosfolípidos naturales, no sólo para mejorar los caracteres organolépticos del producto (sabor y color) sino fundamentalmente para acrecentar la tolerancia y biodisponibilidad de dichos minerales, pudiendo contrarrestar su posible déficit dando dosis normales.

El Tomillo contiene esencia rica sobre todo en timol y carvacrol, dos fenolisómeros. Otros fitoconstituyentes importantes son los flavonoides (derivados del apigenol y luteolol), ácidos-fenoles (ácido cafeico, ácido rosmarínico), vitamina B1, vitamina C, manganeso, taninos, saponinas, etc.

Posee acción antitusígena, expectorante y broncodilatadora; acción antibiótica, antiviral, antiinflamatoria y estimulante de las defensas.
Las inflorescencias de Tila contienen mucílagos que le confieren una acción emoliente y calmante. Además poseen acción sudorífica y estimulante de las defensas. También se utiliza contra la tos.

El Saúco está indicado en afecciones respiratorias (catarros, gripes, bronquitis, etc).
Para un tratamiento más completo asociarlo a:

En afecciones respiratorias crónicas (ver COMPLEPLUS 7).
Es el producto naturista más efectivo que conozco para solucionar problemas de, infecciones de garganta cronicas, tos cronica, gripes cronicas y alergias cronicas, y, las mismas enfermedades que una vez curadas vuelven una y otra vez a los pocos dias o semanas. Sus ingredientes son concentrados y combidnados de una manera equilibrada y son:

Malva:

Se utiliza la flor y a veces las hojas.

La flor contiene sobre todo mucílagos de naturaleza uronica, que por hidrólisis da ac. galacturónico, galactosa, arabinosa, y ramnosa, y antocianosidos cuya genina es el malvidol (le da coloración roja).

Las hojas poseen mucílagos, vitamina A, vitamina B1, Vitamina B2 y vitamina C, además tienen un principio oxitocico y estimulante del intestino.

Posee propiedades emolientes, antiinflamatorias, antitusivas y laxante ligero.

Se utiliza en catarros, bronquitis, faringitis, asma, gripe, estreñimiento, etc.

Usos medicinales del Eucalipto
Dentro de las enfermedades respiratorias podemos destacar el uso del Eucalipto en las siguientes afecciones del aparato respiratorio:

Bronquitis: Su uso puede rebajar la inflamación producida así como eliminar el exceso de secreciones. Para ello, se procede a la decocción de 60 g. de hojas por litro de agua, y se aspiran el vapor tapándose la cabeza con un paño. La infusión es de media cucharada sopera de hojas secas en una taza de agua. Se deben tomar 3 tazas por día.

Gripe: El uso de esta planta permite respirar mejor y reducir el malestar que provoca. El cocimiento de 3 g. de hojas secas por taza de agua, se ingiere 2 veces al día endulzadas con miel.

Dolor de garganta: Los gargarismos realizados con el líquido resultante de la decocción de un puñado de hojas en un litro de agua, ayudan a disminuir la hinchazón de las amígdalas, reducen el escozor y eliminan la infección.

Asma: Reduce la inflamación y permite respirar mejor al asmático. De la decocción de un puñado de hojas por litro de agua, se aspira el vapor tapándose la cabeza con un paño.

Faringitis: Suaviza la faringe y ayuda a eliminar los gérmenes que provocan la inflamación. De la decocción de un puñado de hojas por litro de agua, se aspira el vapor tapándose la cabeza con un paño. La infusión, de media cucharada sopera de hojas secas por taza de agua, se toma 3 veces al día. El mismo tratamiento puede aplicarse en caso de laringitis o inflamación de la laringe.

Catarro: Ayuda a combatir el catarro disminuyendo los síntomas propios de esta enfermedad, rebajando la inflamación, disminuyendo la tos, ayudando a eliminar el exceso de mucus, y suavizando la garganta.

Tos: Su uso resulta muy conveniente en aquellos casos de tos que necesitan de expectoración. El eucalipto, disminuye la necesidad de toser, un síntoma que acompaña a muchas de las enfermedades del aparato respiratorio, suaviza la garganta, calma la irritación bronquial y la tos en las enfermedades respiratorias de origen bacteriano, incluida la tosferina. Para ellos, se inhala el vapor del cocimiento de un par de cucharadas de hojas secas de Eucalipto por litro de agua.
Fiebre: El aceite de Eucalipto posee propiedades febrífugas muy útiles para disminuir la fiebre. Para ello, se moja un paño con unas gotas de aceite y se aplica sobre la piel.

Sinusitis: Apropiado para favorecer la salida del exceso de mucosidad. Del cocimiento de un puñado de hojas se aspira el vapor cubriéndose la cabeza con un paño.

Rinitis: Su uso puede ayudar a desinflamar las fosas nasales. (Cocimiento de 60 gr. por litro de agua . Aspirar los vapores cubriéndose la cabeza con un paño.)


La vitamina C ayuda al desarrollo de dientes y encías, huesos, cartílagos, a la absorción del hierro, al crecimiento y reparación del tejido conectivo normal (piel más suave, por la unión de las células que necesitan esta vitamina para unirse), a la producción de colágeno (actuando como cofactor en la hidroxilacion de los aminoácidos lisina y prolina), metabolización de grasas, la cicatrización de heridas. Su carencia ocasiona el escorbuto, también resulta esta vitamina un factor potenciador para el sistema inmune aunque algunos estudios ponen en duda esta última actividad de la vitamina C. Los Glóbulos blancos contienen 20 a 80 veces más vitamina C que el plasma sanguíneo, y la misma fortalece la capacidad citotóxica de los neutrófilos (glóbulos blancos).

La Vitamina C es esencial para el desarrollo y mantenimiento del organismo, por lo que su consumo es obligatorio para mantener una buena salud.

La vitamina C sirve (entre muchas otras funciones) para:

•Evitar el envejecimiento prematuro (proteger el tejido conectivo, la "piel" de los vasos sanguíneos).

•Facilita la absorción de otras vitaminas y minerales.

•Antioxidante.

•Evita las enfermedades degenerativas tales como arteriosclerosis, cáncer, enfermedad de Alzheimer.

•Evita las enfermedades cardíacas.

Saludos. Tengo el Melasor 10 y el compleplus 7 recomendados a la venta.

Atte. TMN Gilberto Higareda Cuevas 


Comentarios